7 de mayo de 2013

De barrotes, libertad y venas.


     Recuerdo que compré mi libertad al alto precio de mi cordura.
     Mi nueva cárcel - Que se sale de una para entrar a otra - es la realidad.

     Y de aquí no salgo.

4 comentarios:

  1. La maldita realidad... A veces es estar realmente en una cárcel :/.
    Saludos!

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  2. sinceridad , nuestra vida es una inestabilidad completa , pero ese es el precio que tenemos que pagar por una vida perpleja y diferente.

    saludos.

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    1. Y con nada estamos contentos, con nada nos saciamos. Si es estable, estaríamos hablando de lo mismo...Es como un asqueroso círculo vicioso.
      ¡Abrazos!

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¿Cuál es su dictamen, doctorx?